Una idea es una idea, hasta que te pones manos a la obra y la haces realidad. Hacer una idea realidad es lo más difícil de cualquier proceso de creación. Los grandes logros siempre han estado precedidos por una idea previa. Además, estoy seguro de que en la mayoría de los casos, la idea original era más débil que su propia ejecución. Sin embargo, solemos darle a las ideas una importancia que no hace justicia al valor que tiene la iniciativa de transformar lo abstracto en algo concreto. Muchas veces las ideas se quedan ahí, en el plano de lo intangible.
Tensiones creativas
Tensiones creativas
Tensiones creativas
Una idea es una idea, hasta que te pones manos a la obra y la haces realidad. Hacer una idea realidad es lo más difícil de cualquier proceso de creación. Los grandes logros siempre han estado precedidos por una idea previa. Además, estoy seguro de que en la mayoría de los casos, la idea original era más débil que su propia ejecución. Sin embargo, solemos darle a las ideas una importancia que no hace justicia al valor que tiene la iniciativa de transformar lo abstracto en algo concreto. Muchas veces las ideas se quedan ahí, en el plano de lo intangible.